El sábado pasado tuve oportunidad de dar la bienvenida y recibir a 88 personas que por algún motivo u otro, esperan enfrentar un cambio importante de vida. Rostros diversos, unos con más preocupación, algunos otros con más desenfado, ingresaban al gran salón donde llevaríamos a cabo la aplicación de un examen más de IELTS - International English Language Testing System - el examen de inglés más popular en el mundo con más de dos millones de personas que lo presentan cada año.
Y la pregunta es ¿por qué lo hacen? las razones personales serán evidentemente distintas para cada caso, pero en términos generales podemos decir que más personas llegan a más lugares, gracias a IELTS. El motor principal que mueve a tantas almas para someterse a este largo examen es cambiar su vida, para mejorar. Viajar al extranjero para realizar estudios, migrar por trabajo, adquirir una nueva nacionalidad, en fin, cambios importantes de vida que empiezan quizás por dar este importante paso.
De acuerdo a la información publicada en el portal del British Council en México - http://www.britishcouncil.org.mx/examen/ielts - presentar IELTS abre miles de puertas ya que puede ayudarte a estudiar, trabajar y a vivir alrededor del mundo. Más de 8,000 organizaciones el mundo lo aceptan, incluyendo entidades gubernamentales, académicas y de empleo. De hecho, IELTS es el único examen de inglés aceptado para propósitos de inmigración, en todos los país que tienen el inglés como requisito.
Si bien la experiencia no es particularmente sencilla - el examen tiene una duración aproximada de 3 horas y media, sin contar la entrevista oral que se hace posteriormente y uno a uno con un examinador debidamente calificado para ello - bien vale la pena superar el reto a fin de perseguir el objetivo final.
Bajo estrictas normas protocolarias de supervisión y vigilancia transcurren las sesiones, de tal suerte que el diagnóstico en las distintas competencias para el dominio del idioma - escucha, escritura, lectura y habla - sea el más preciso y ofrezca una garantía para el candidato que lo presenta.
El 14 de octubre de 1998, yo presenté IELTS. Al observar a los 88 candidatos, haciendo en silencio su mejor esfuerzo por alcanzar el máximo puntaje para este examen, recordé el aula pequeña de la sucursal del Anglo Antonio Caso, ubicada en la Colonia Juárez, donde viví esta experiencia. Mi deseo en aquel entonces, era migrar al Reino Unido para estudiar una maestría. Ciertamente éramos muchísimo menos candidatos de los que imponentemente recibí este sábado pasado, y a casi 17 años después, pude constatar que el esfuerzo y la perseverancia por la lucha de una vida mejor, se ve multiplicada en muchos más rostros, promoviendo con ello el crecimiento de esta industria y permitiendo que el cambio, a pesar de que duela, sea lo mejor que puede pasarnos para mejorar.
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