Google continúa siendo el buscador por antonomasia , el lugar preferencial al que los usuarios se dirigen cuando buscan información sobre productos y servicios. Por esta razón ocupar las posiciones más relevantes en el buscador es constante. Para optimizar la estrategia, conviene conocer cuáles son los patrones de búsqueda más habituales y trabajar para aparecer en el lugar oportuno.
Según el informe presentado por Mediative, los usuarios continúan centrando su atención preferentemente en las primeras posiciones de Google, aunque bien es cierto que cada vez dedican menos tiempo a su análisis que hace 10 años.
La experiencia y la evolución tecnológica han propiciado que los usuarios necesiten menos tiempo para decidir dónde hacer clic, para saber qué resultados mejor se adaptan a sus necesidades. Si en 2005 los usuarios dedicaban alrededor de 2 segundos a revisar cada resultado de los que Google les proporcionaba, en la actualidad este tiempo ronda una media de 1.17 segundos, aproximadamente la mitad. Este es el tiempo que las marcas tienen para llamar su atención y llevarse el clic.
El estudio destaca 2 factores fundamentales, que caracterizan la página actual de resultados de Google. De una parte, el primer resultado orgánico no siempre está situado en la parte superior de la pagina, si no que Google modifica las SERPs en función del tipo de búsqueda, añadiendo elementos tales como resultados de Google Maps, imágenes, videos, carrusel, etc.
Esta nueva realidad es necesario aceptarla como una ventaja más, que como un inconveniente, una nueva oportunidad de obtener resultados en la parte superior de la pagina, sin tener que dedicar todos los esfuerzos a los resultados orgánicos. Así las empresas pueden trabajar el SEO para imágenes o videos, además su presencia en Google Maps.
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